Consejos para un afeitado preciso y un cuidado impecable

Afeitarse es una tarea rutinaria para los hombres. En teoría parece muy sencilla, pues básicamente consiste en aplicar espuma, afeitarse y enjuagarse. Sin embargo, la realidad dice otra cosa. El afeitado no suele ser tan perfecto como muchos quisieran: es posible terminar con cortes, rasguños, irritaciones, erupciones o zonas sin afeitar.

El correcto cuidado de la barba es fundamental para proteger la piel. El afeitado diario o frecuente causa diversos efectos en la piel: la lesiona de manera continuada, elimina las células de la capa externa de la epidermis y provoca pequeños arañazos por el rascado de la cuchilla. Para evitar los efectos del afeitado en la piel es importante seguir algunos consejos antes, durante y después de la faena. 

Antes del afeitado

El primer paso para lograr un afeitado perfecto, sin irritaciones, cortes o erupciones, es preparar el rostro. Mientras más tratada esté la piel antes de rasurarse, más fácil será el deslizamiento de la cuchilla.

Para el afeitado húmedo clásico, en el que se utiliza la cuchilla, lo más recomendable es lavar previamente la cara con un limpiador facial suave. Este lavado es importante por dos razones: primero porque es necesario trabajar sobre una superficie limpia; segundo, porque reblandece los vellos. Lavar el rostro antes de afeitarse elimina la suciedad, la oleosidad y las células muertas; además, hidrata los vellos, por lo que se reduce la fuerza que hay que hacer para cortarlos.

Si se realiza un afeitado en seco con una maquinilla eléctrica, tampoco se puede descuidar la piel. En este caso se pueden utilizar lociones con alcohol y lípidos para reducir el riesgo de sufrir irritaciones, así como emulsiones acuosas que ayudan a ablandar la barba para que la maquinilla se deslice con mayor facilidad. 

Durante el afeitado: los productos que necesitas

Para iniciar con el afeitado se necesita: 

• Gel o espuma de afeitado

Son esenciales para suavizar la piel y hacer que la cuchilla se mueva por el vello de forma sencilla. Hoy se pueden encontrar productos con sustancias que no maltratan la piel y que incluso ayudan a cuidarla. Algunos, por ejemplo, contienen triclosán, una sustancia antiséptica que protege de posibles infecciones en zonas microtraumatizadas, así como sustancias humectantes y reparadoras, como la alantoína y la glicerina. Además del gel o la espuma de afeitado, se pueden emplear otros productos, como crema de jabón, barras de jabón alcalino y jabones especiales para la barba.

• Cuchillas

El instrumento que se emplea para el afeitado es determinante en el resultado. Lo más recomendable es que las cuchillas tengan múltiples hojas, mango pivotante, recortadora de precisión en la parte trasera del cartucho y bandas lubricantes. Estas, además, deben estar limpias y en buen estado; de lo contrario, aumentan las posibilidades de sufrir cortes, rasguños e irritación. 

Claves para un afeitado preciso

• Aplica el gel o la espuma en las zonas que afeitarás. Es importante que los vellos se impregnen bien con el producto.
• Pasa las cuchillas suavemente, siempre en la dirección en la que crece el pelo para evitar irritaciones y la aparición de vellos encarnados.
• Utiliza las dos manos: una para mover la maquinilla y la otra para estirar la piel. De esta manera la cuchilla se desliza mejor y colocas los poros a favor de ella.
• Enjuaga las hojas de afeitar con frecuencia durante la afeitada; así eliminarás restos de vello, piel y producto. 
• Al terminar el afeitado, enjuaga bien la zona para eliminar cualquier resto de gel o espuma. 

Después del afeitado

Para el correcto cuidado de la barba es necesario aplicar un producto hidratante después del afeitado. Lo ideal es utilizar una loción o un bálsamo, que además de ayudar a proteger y suavizar la piel del rostro, realzan el aspecto al ras del afeitado. Otra opción es el tónico hidroalcohólico con perfume, un producto recomendado para hombres con piel seborreica porque funciona como antiséptico gracias a su contenido de alcohol. Además, suaviza la piel y aporta sensación de frescor.